Este sábado se cumplió un nuevo año de la mayor tragedia de Rosario, ocurrida el pasado 6 de agosto de 2013, donde 22 personas murieron como consecuencia de la exposición y derrumbamiento de un edificio ubicado en calle Salta 2141, por lo que desde la mañana temprano hubo actividades para homenajear a los fallecidos y a sus familias.
El acto comenzó pasadas las 8.15 en el Monumento Nacional a la Bandera, donde autoridades provinciales y municipales realizaron el izamiento de la insignia patria. Luego, se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino, con el acompañamiento de sicuris, y del coro del Instituto Provincial de Música Carlos Guastavino.
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Allí, se largó el “trote simbólico” de 22 corredores, en representación de los muertos en la tragedia, y al que este 2022 se sumó público en general y 22 bomberos de distintos destacamentos de la ciudad.
En tanto, en Salta 2141 se desarrolló el acto central que se inició con la actuación de un grupo de tango y coro de la comunidad educativa del Instituto Carlos Guastavino y que, después de que arribaron los corredores, a las 9.38, hora exacta en la que se produjo el estallido, tal como es tradición se hicieron sonar las sirenas de los bomberos.
Luego se leyeron los nombres de las víctimas y los corredores subieron al escenario emplazado frente al solar donde estaban los edificios colapsados para dejarle ofrendas florales.
Por último, hubo palabras de agradecimiento de Marcela Nissoria, presidenta de la Asociación Civil Salta 2141 Memoria y Justicia, y de Nora Giraudo, mamá de una de las víctimas.
Este año la conducción del acto estuvo a cargo del periodista Hernán Funes, hijo de la fallecida fiscal Graciela Argüelles, quien llevó adelante la investigación judicial de la tragedia e impulsó las acusaciones.