Pablo Polito, director provincial de Atención de Emergencias, informó que la central 911 recibe aproximadamente 7 mil llamadas por semana. Destacó que el tiempo de respuesta ante emergencias ha mejorado significativamente, reduciéndose a casi la mitad en comparación con el año pasado. Además, señaló que “el 20 por ciento” de las llamadas provienen de sistemas de alarmas residenciales, muchas de las cuales son “falsos positivos” y no están relacionadas con situaciones de inseguridad. Por ello, hizo un llamado tanto a las empresas prestadoras como a los usuarios a ser prudentes en el uso de estos servicios.
Polito explicó que el 911 coordina el despliegue de recursos policiales según un plan por cuadrículas, lo que permite enviar el móvil más cercano al lugar de la emergencia. “En diciembre nos encontramos con una situación crítica en cuanto a la disponibilidad de recursos policiales, con solo 10 a 20 móviles para atender emergencias, lo que resultaba en tiempos de respuesta de entre 18 y 20 minutos”, relató. Sin embargo, gracias a la incorporación de más de 220 móviles y a la presencia de hasta cien binomios de caminantes, el tiempo de respuesta se ha reducido a un rango de 3 a 8 minutos para incidentes como violencia de género, heridos con armas y robos.
En cuanto al aumento de llamadas al 911, Polito destacó: “En los últimos meses hemos visto un incremento en el número de llamadas, con un promedio de 7 mil por semana. Muchas de estas llamadas provienen de personas que reportan situaciones sospechosas, lo cual es valioso para la prevención policial. Es importante que la gente llame, ya que esta comunicación es anónima y contribuye a la seguridad, no solo en casos de asistencia médica, accidentes o incendios, sino también de manera preventiva”.
Polito también se refirió a la disminución de delitos predatorios, mencionando que “en enero comenzamos con 4.500 delitos de este tipo, y esa cifra ha bajado un 40 por ciento”. Este descenso, según él, es resultado del plan de seguridad que incluye la mayor presencia de recursos en la calle, la colaboración de fuerzas federales y la eficaz respuesta de los móviles del 911.
Sobre las alarmas privadas, Polito subrayó que “el 20 por ciento de las llamadas al 911 están relacionadas con alarmas particulares, y aunque no siempre resultan en un evento delictivo, las alarmas a menudo logran disuadir al delincuente”. Aclaró que no todas estas llamadas son falsas alarmas, pero insistió en la necesidad de que tanto las empresas de seguridad como los usuarios utilicen estos sistemas con responsabilidad. Anunció que se está trabajando en un plan para mejorar la eficacia de la respuesta ante incidentes relacionados con alarmas, en colaboración con los prestadores de estos servicios.