En los últimos meses, la Ciudad experimentó un notable aumento en la cantidad de personas dedicadas a cuidar autos en la vía pública, un fenómeno directamente vinculado a la crisis económica. Desde abril, las autoridades locales intensificaron los operativos de control del espacio público, en colaboración con el Ministerio de Seguridad y la Policía, para abordar esta situación.
“Los operativos se centran en 17 áreas estratégicas de la ciudad, seleccionadas en base a denuncias recibidas a través del 147, el cruce con un mapa de calor y zonas de alta afluencia, como centros comerciales, hospitales y shoppings. En estas cuadrículas se identificaron la presencia de aproximadamente 352 cuidacoches, algunos de los cuales han sido detenidos por diversos motivos”, detalló Diego Herrera, secretario de Control de la Municipalidad.
Desde que se iniciaron estos controles en abril, 17 personas han sido demoradas, y en algunos casos, las detenciones se debieron a órdenes de captura pendientes. Estas personas fueron puestas inmediatamente a disposición de la fiscalía. Además, se han reportado incidentes de cuidacoches violentos, quienes han sido denunciados por vecinos debido a conductas agresivas, como la imposición de tarifas fijas o la creación de disturbios bajo la influencia del alcohol.
El perfil de los nuevos cuidacoches es variado. Mientras que algunos se integran a la comunidad de manera pacífica y son aceptados por los vecinos, como en un caso donde un cuidador recibió el respaldo de los residentes de una cuadra específica, otros muestran comportamientos problemáticos. En uno de estos operativos, se encontró a un individuo con herramientas como pinzas cortantes y destornilladores en su mochila, lo que llevó a su inmediata detención.
La crisis económica ha obligado a más personas a buscar medios de subsistencia en las calles, lo que ha generado una mayor presencia de cuidacoches en la Ciudad. Sin embargo, este aumento también ha traído consigo desafíos en términos de seguridad y convivencia en el espacio público. Las autoridades continúan monitoreando la situación, con la intención de mantener el orden y proteger a los ciudadanos.