Desde la puesta en marcha de la ordenanza Alcohol Cero al volante, el 8 de mayo de 2021, la relación entre controles y casos positivos descendió de 13% a menos del 5% desde la implementación de la ordenanza. Mientras que, dentro de los infractores, quienes fueron detectados con más de un gramo de alcohol se redujeron notablemente.
“Estos datos marcan una modificación importante en el comportamiento de los población. Hay un cambio cultural notorio y mayor concientización sobre que no hay que consumir alcohol a la hora de tomar el volante”, señaló el secretario de Control municipal, Diego Herrera, quien agregó: “Los resultados también destacan los controles que estamos haciendo. Un tránsito ordenado requiere de una presencia firme y continua en la calle. Hemos fortalecidos las intervenciones y así continuaremos”.
Otra cuestión importe es la reducción que se produjo en cuanto a positivos con altas graduaciones de alcohol, porque está relacionado directamente con la prevención de accidentes de tránsito graves.
En el año 2021, los casos con más de un gramo por litro de sangre fueron de 825 y 294 por encima de 1,5 gramo por litro en sangre; desde ese momento la curva fue en descenso. En 2023, los positivos “graves” fueron 297 por encima del gramo por litro en sangre. Y con un índice mayor a 1,5 gramo por litro en sangre bajó a 118. Esa tendencia continuó en los primeros cuatro meses de este 2024.
Vale destacar que estos logros no resultan menores en un país donde los siniestros viales son la principal causa de muerte en menores de 35 años, y donde en la mitad de los casos de víctimas fatales hay consumo de alcohol.