En mayo pasado el cielo raso de la Técnico “Dr. Rodolfo Rivarola” se vino abajo por completo en un sector del establecimiento. A más de dos meses de ese hecho la infraestructura no se repuso y por eso quienes estudian en el lugar decidieron protestar con una ingeniosa iniciativa.
Los estudiantes decidieron tapar con boletas de precandidatos el techo siniestrado. Al no contar con techo, los excrementos de las palomas caen sobre las carpetas de los estudiantes en una clara escena que hace imposible desarrollar con normalidad la actividad.
“La idea surgió de parte del personal de acá, de la escuela, viendo el material que están hechos, esas propagandas con las fotos de los candidatos, entonces surgió esa idea porque era parecido a lo que se quería poner de cielo raso. Nos pareció una buena idea porque primero está en la foto de cada candidato y segundo que es de un material que bien podría ser el cielo raso y que seguramente debe tener un costo altísimo, siendo algo que para ellos es momentáneo y después están tirados por las calles contaminando”, enfatizó Mónica Lorezatto docente del establecimiento a Conclusión.
En mayo de este año, el techo de la biblioteca se desplomó en pleno horario de clases y cayó sobre mesas y libros. En ese momento había un puñado de estudiantes, que sufrieron heridas mínimas y se llevaron un gran susto.
“Tenemos el tema del frío, segundo la transmisión de sonido de un aula a otra que dificulta poder dar clase -ya que hay mucho bullicio- y después el tema de las palomas que están habitando entre el cielo raso y el techo que ahora están todo el día y los excrementos caen sobre la cabeza de los alumnos directamente”, agregó.
Sobre la respuesta por parte del Ministerio de Educación, la docente dijo que “apenas de derrumbó quitaron el cielo raso de toda la escuela para prevenir nuevos desmoronamientos y algún accidente más grave. Después solamente promesas e intentos de hacer un cielo raso que hasta el momento no se ha concretado. Por ello, seguimos esperando”.
La actividad que llevaron adelante fue colectiva y pudieron participar todos los alumnos o docentes que quisieran acercarse y colaborar. “Los que más estuvieron fueron un grupo de sexto año que son los chicos de mayor edad y con el tamaño físico para realizar la actividad”, finalizó.