Otra vez la polémica envuelve a la Argentina en su voto en las Naciones Unidas. Como si fuera un deja vu, una situación similar se vio el día lunes, en la primera votación del país ante la Asamblea General de la ONU con Gerardo Werthein al frente de la Cancillería. Argentina también había sido la única nación en votar en contra de una resolución sobre los derechos de los pueblos indígenas.
En este ocasión, el país fue el único en oponerse a un documento en apoyo a la intensificación de los esfuerzos para prevenir y eliminar todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas.
El escrito presentado ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas el pasado 11 de noviembre lleva las firmas de varias naciones, como Alemania, Chile, España, Bolivia, Italia, Ucrania, Uruguay y Venezuela.
Estos paises se comprometen a “eliminar todas las formas de violencia contra todas las mujeres y las niñas en los ámbitos público y privado, incluidas la violencia sexual y por razón de género, la trata y la explotación sexual y otros tipos de explotación”.
170 países votaron en favor de la resolución –incluido Estados Unidos e Israel– y solo 13 se abstuvieron: Bielorrusia, Burundi, República Popular de Corea, Irán, Libia, Mali, Nicaragua, Níger, Nigeria, Rusia, Senegal y Siria. El único que votó en contra fue Argentina.