“Nosotros estuvimos trabajando hasta la semana pasada y no nos quieren pagar” manifestó Eriberto, uno de los cesanteados de dicha firma, en declaraciones a Versión Rosario.
El grupo de trabajadores se plantó con un cartel en la puerta de lo que era la fábrica Almar, que desde hace aproximadamente 20 años funciona de forma irregular detrás de una casa ubicada en Avellaneda al 500.
“Nos deben seis meses de sueldo atrasados, nos deben aguinaldos, nos quieren dar 50 mil pesos por semana para que nosotros nos callemos” aseguró Eriberto quien agregó: “nosotros tenemos familias que mantener y con 50 mil pesos no nos alcanza. Nosotros queremos cobrar todo lo que se nos debe y después seguir trabajando o no es la decisión de ellos”.
Eriberto asegura que en la firma trabajaban 20 empleados, “todos en negro” algunos con más de 20 años de trabajo. Según el trabajador, desde el Ministerio les dijeron que “vayan y hagan la protesta que tengan que hacer, vendan lo que tengan que vender para que les paguen lo que les corresponde a cada uno”.