Tras el histórico temporal, que trajo lluvias intensas, ráfagas de viento y un impactante granizo, el cual dejó importantes destrozos en Rosario y en localidades de la región. Una de las más afectadas fue Casilda, donde lanzaron una reciente colecta para asisitir a los damnificados. La feroz tormenta dejó decenas de árboles caídos, columnas de luz y rotura de vehículos y casas.

Las ráfagas alcanzaron los 115 kilómetros por hora, lo que explica la magnitud del desastre. Ante este panorama, la Municipalidad de dicha localidad realiza una colecta solidaria con el fin de reunir elementos esenciales para los vecinos damnificados.
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Entre los artículos que se solicitan se encuentran alimentos no perecederos, frazadas y agua potable. Las donaciones pueden acercarse este sábado de 10 a 12 en calle Casado 2090.

En cuanto a los servicios eléctricos, el intendente Guillermo Franchella explicó este viernes que “el 80% de la población está sin acceso a los servicios eléctricos” debido a la caída de cables y columnas. “Hasta que no se aseguren este tipo de situaciones no va a haber luz para toda la ciudad”, agregó.
Asimismo, el municipio llevará a cabo un relevamiento en los barrios más afectados, como es el caso de Nueva Roma C y D, y Yapeyú, para evaluar las necesidades sanitarias de la población. Los equipos de salud trabajarán por cuadrillas y recorrerán casa por casa, al tiempo que se reforzará la limpieza de los hogares y se entregarán kits sanitarios que incluirán repelente de mosquitos, lavandina y paracetamol.
En tanto, Aguas Santafesinas brindará su colaboración con el abastecimiento de agua potable en las zonas más afectadas, a través de una cuba. Además, el Centro de Salud Yapeyú reforzará la atención médica y distribuirá medicamentos a quienes los necesiten.