El Gobierno Nacional presentó hoy un proyecto de ley que busca establecer un procedimiento simplificado para el divorcio, tanto en sede administrativa como civil, cuando ambas partes están de acuerdo en disolver el matrimonio. Esta propuesta tiene como objetivo reducir la judicialización de los divorcios, que suele prolongar el proceso y generar mayores costos, tanto en términos de tiempo como de dinero, debido a los honorarios legales y las costas judiciales.
Según el documento presentado por el Ministerio de Justicia, “el tiempo que toma el proceso judicial impide que las partes puedan disponer de algunos de sus bienes libremente mientras dure el trámite”. A esto se suma que los divorcios que requieren intervención judicial sobrecargan el sistema judicial, retrasando otros casos y generando costos adicionales para el Estado, lo que indirectamente afecta a los contribuyentes.
En lugar de recurrir a los tribunales, el proyecto propone un mecanismo más ágil y económico, permitiendo a los cónyuges optar por un “divorcio simplificado”. Esta vía administrativa les permitirá poner fin a su matrimonio de manera más rápida y accesible, sin la necesidad de acudir a un juez. El procedimiento sería gestionado por el oficial público del Registro de Estado Civil y Capacidad de las Personas, replicando el mecanismo de mutuo acuerdo que dio origen al matrimonio.
El Ministerio de Justicia mencionó que varios países ya aplican este tipo de mecanismos. Ejemplos de ello son Brasil, Portugal, Colombia, México, Ecuador, Bolivia, Noruega, Italia, Rumania, Estonia, Letonia y Japón, donde se permite el divorcio administrativo o notarial, dependiendo del caso.
El texto del proyecto también aborda algunas críticas históricas al divorcio, como la idea de que facilitar su acceso destruiría la familia y la sociedad. El Gobierno argumenta que, aunque tras la sanción de la Ley 26.994 se registró un aumento temporal en los divorcios, esto se debió a que muchas separaciones previas se formalizaron bajo el nuevo régimen. Lejos de destruir a la familia, el divorcio ofrece una solución a situaciones insostenibles, reduciendo el conflicto y los efectos negativos que una convivencia forzada podría tener en los hijos.
Finalmente, se señala que, según estudios realizados a lo largo de los años, los efectos perjudiciales en los hijos no son causados por el divorcio en sí, sino por el deterioro de las relaciones dentro de un matrimonio disfuncional, independientemente de que se formalice la separación o no. El proyecto subraya que facilitar el divorcio puede, en muchos casos, ser un alivio tanto para los adultos como para los menores involucrados.