El papa Francisco, de 86 años, continúa con evolución favorable tras la operación de abdomen a la que se sometió el pasado miércoles para evitar una obstrucción intestinal y este domingo almorzó con sus colaboradores.
“El cuerpo médico informa que el postoperatorio del Papa Francisco es regular. El Santo Padre continúa afebril y hemodinámicamente estable; se sometió a fisioterapia respiratoria y continuó movilizándose”, planteó el director de la oficina de Prensa de la Santa Sede Matteo Bruni en un comunicado.
Francisco se recupera en una habitación del piso 10 del hospital Gemelli de Roma tras la intervención de casi tres horas, recitó el Ángelus dominical de forma privada, por consejo médico, en vez de hacerlo frente a los fieles de la Plaza San Pedro, como es habitual.
“Durante la mañana siguió en directo por televisión la Santa Misa y recibió la Eucaristía. Luego se dirigió a la capillita del apartamento privado, donde se reunió en oración para el rezo del Ángelus”, explicó Bruni en esa dirección.
El Papa “almorzó luego junto a quienes lo asisten en estos días de hospitalización en el departamento privado: médicos, auxiliar de salud, enfermeras, auxiliares y personal del Cuerpo de Gendarmería”, sostuvo el comunicado.
“La Eucarística nos llama al primado de Dios y al amor a los hermanos. Este Pan es por excelencia el Sacramento del amor. Es Cristo que se ofrece por nosotros y nos pide que hagamos lo mismo, para que nuestra vida se convierta en pan que alimenta a los hermanos”, tuiteó este domingo Francisco.
Este sábado el Vaticano había informado que Francisco mantiene la evolución favorable “entre descanso y trabajo”, con la idea de que pueda permanecer internado toda esta semana hasta retomar sus audiencias el domingo 18, como informó el Vaticano.