Con la confirmación del boleto gratuito de colectivo entre las 15 y las 22, Rosario prepara su agenda cultural en el contexto del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia que se conmemora el próximo 24 de marzo.
Para comenzar, este miércoles 23 a las 21 tendrá lugar la tradicional vigilia en la plaza 25 de Mayo, acompañada del estreno del capítulo 2 de La Memoria Inquieta, producción audiovisual realizada en conjunto con Unicanal (el canal de la UNR) que busca acercar la propuesta del museo a la comunidad.
En esta edición titulada búsqueda pacífica de justicia se retoma la lucha de Madres de Plaza 25 de Mayo de Rosario y de familiares, su pasado y el legado que han dejado en la sociedad post dictadura. En este capítulo fueron entrevistadas Ana Moro integrante de La ronda de los jueves, Mónica Gangemi de la Asociación Civil Compromiso Vial, Lua Conechny de Nietes, Marianela Scocco investigadora que realizó un libro sobre la historia de Madres de Plaza 25 de Mayo, Federico Pagliero abogado, trabajador del Museo de la Memoria en Centro de Estudios Jurídicos, en A.P.D.H y querellante en los juicios de Lesa Humanidad.
El jueves 24 de marzo a las 10 hs se realizará la ceremonia de plantación de árboles en el Bosque de la Memoria (Central Argentino 501, parque Scalabrini Ortiz). Habrá una actividad performática y de freestyle. En caso de lluvia se reprograma para el 25 de marzo.
El mismo día 24, el Museo de la Memoria abrirá en un horario especial para acompañar la concentración que se realiza en la plaza San Martín previa a la movilización por el 46° aniversario del golpe de Estado.
El viernes 1° de abril se realizarán dos actos de señalización de calles que llevan los nombres de soldados rosarinos caídos durante la Guerra de Malvinas, a 40 años del conflicto bélico por la soberanía de las islas del Atlántico Sur.
Lucas Massuco, coordinador institucional del Museo de la Memoria, expresó: “a 46 años del último golpe de Estado en nuestro país, el Museo de la Memoria propone un ejercicio de reflexión crítica que gire en torno a los vínculos entre pasado y presente y a los dilemas que enfrenta nuestro sistema democrático. Lo hacemos encarando diálogos complejos con las nuevas generaciones, escuchando sus ansiedades y transmitiendo las memorias de luchas y resistencias pasadas que forjaron nuestra democracia y nuestras libertades”.