Vecinos de la zona suroeste protagonizaron una manifestación enérgica contra un hombre acusado de abusar de dos niñas del barrio. Durante la pueblada, el acusado fue agredido físicamente hasta que fue detenido el lunes por la noche. Sin embargo, al enterarse de que el hombre había sido liberado el martes, los vecinos se dirigieron a su vivienda y la destrozaron. Cuando la policía arrestó a uno de los manifestantes, la protesta se trasladó a la comisaría 21ª para exigir la liberación del detenido.
Las denuncias contra el presunto abusador comenzaron hace meses, cuando una niña de 9 años le contó a su abuela que el vecino la había tocado. Los padres de la niña denunciaron al hombre, de unos 30 años, y se inició una investigación. El pasado lunes, una hermana mayor de 13 años también reveló a su familia que había sido víctima de abusos por parte del mismo individuo.
Ante esta nueva revelación, el padre de las niñas decidió confrontar al acusado el lunes por la noche. Vecinos de la zona de Castellanos al 5300 se unieron y comenzaron a agredir al hombre, un ataque que solo se detuvo con la intervención de la policía, alertada por la madre de las víctimas. No obstante, el acusado fue liberado el martes a las 10 de la mañana, lo que enfureció a los vecinos que se dirigieron a su casa y la destruyeron.
La policía intervino nuevamente para calmar a los vecinos y detuvo a uno de los manifestantes. Gerardo, el padre de las víctimas, declaró que el arrestado era un vecino que acababa de llegar de trabajar y no tenía relación con las manifestaciones. Esto provocó una nueva protesta frente a la comisaría de Arijón al 2300 para exigir la liberación del hombre detenido.