En el último tiempo se convirtió en moneda corriente el conocer que una cueva de la “city rosarina” era el salvoconducto perfecto del dinero sucio recaudado por el narcotráfico, un tema que hoy en día mantiene en vilo a la ciudad con homicidios recurrentes por las disputas entre las bandas narco. Por ello, la Justicia avanzó con múltiples allanamientos que sirvieron para esclarecer alguna que otra investigación, aunque el mundo de las finanzas con este sector del delito parece ser tan grande que nunca se termina de atrapar a los que verdaderamente cortan la torta. Ante la lupa de la Justicia, muchos dueños de estas financieras paralelas deciden guardarse por un tiempo o bien reubicarse para continuar con el negocio bajo una fachada, como puede ser la de una inmobiliaria. ¿Quién sospecharía de una casa de propiedades?. Un rubro que siempre dio frutos, pese al mal momento económico del país. Pero hay una local céntrico que bajo la figura de compra y venta de locaciones, en realidad te compra -o vende- dólares, euros y todo tipo de divisa que necesites.
Tal es el caso de G. L, quien enterado de allanamientos por investigaciones relacionadas al narcotráfico y lavado de activos, habría decidido mudar su financiera de Dorrego al 900 a Rioja al 1400, manteniéndose en el centro de Rosario. Lo curioso es que en esa dirección figura una inmobiliaria, que de inmobiliaria tiene muy poco o casi nada. Ya que en ese lugar funciona la casa de cambio que por motivos ya mencionados decidió cubrir su negocio con la fachada de venta y compra de inmuebles. Por si fuera poco, el responsable de la falsa inmobiliaria, ya se promociona a través de WhatsApp, reconociendo haber trabajado en la anterior locación y ofreciendo nuevas transacciones monetarias.
“Hola soy Guille, de calle Dorrego, este es mi nuevo número laboral, agendame por favor. Si necesitas hacer una operación de cheques contra acreditación/transferencias me consultas y te cotizo. Un abrazo”, culmina el mensaje de texto que sirve a manera de publicidad y que ya circula en varios celulares de la ciudad.
De hecho, esta nueva jugada de la “falsa inmobiliaria” se pudo llevar a cabo porque en un fin de semana lograron vaciar la oficina de calle Dorrego, cuando días antes una serie de procedimientos judiciales habían dado con casas de cambios similares. Esa financiera -ahora desmantelada y reubicada con dirección en Rioja- estaría en el ojo de una investigación por ser eventual distribuidora de dinero a cabecillas de organizaciones como la que dirige Ramón Ezequiel “Monchi” Machuca, vinculado a Los Monos, y René Ungaro, relacionado con el clan Funes. Además, el administrador estaría comprometido con diversas estafas producidas en un loteo ubicado en la localidad de Roldán, a pocos kilómetros de Rosario.
Así que ahora la Justicia deberá buscar en el sector de bienes raíces y puede que al consultar en alguna inmobiliaria, le intenten cambiar unos verdes por unos violetas.