Bajo las consignas de “Basta de Violencia” y “Basta de Balaceras a las Escuelas”, los docentes de escuelas públicas concentrarán a media mañana de este martes en la plaza San Martín para pedir que se ponga fin a los episodios de intimidación pública que en las últimas semanas tienen como blanco a los edificios escolares. Desde la delegación Rosario de Amsafé se decidió desobligar a los alumnos en las últimas dos horas del turno mañana y las primeras dos del turno tarde, a partir de las 10.30 y hasta las 14.30, para que los maestros puedan participar de la manifestación.
El reclamo de los docentes llega tras dos nuevos ataques desatados contra escuelas de la zona norte de la ciudad. Este lunes, las escuelas José Mármol, de Larrea al 300 bis, y Rosa Ziperovich, de avenida Sabin al 1100, permanecieron sin actividad después de que sus edificios fueran baleados durante la madrugada del sábado. En ambos casos, los delincuentes dejaron también un mensaje amenazante.
Si bien estas arremetidas no estuvieron dirigidas hacia el personal docente o no docente de las instituciones, causaron una profunda preocupación en la comunidad escolar. “Estamos consternados, tristes y preocupados”, sostuvo Ana Rosa Ugarte, directora de la escuela primaria de barrio Ludueña, en un intento por resumir el estado de ánimo de la institución escolar.
La docente destacó que la escuela “es el lugar seguro al que los chicos pueden venir, estar con amigos y tener un plato de comida caliente si lo necesitan. Es un centro de referencia social para todo el barrio” dijo y consideró que existen bandas “que quieren utilizar a las instituciones públicas como una forma de hacer llegar su mensaje hacia otras personas que nada tienen que ver con la comunidad educativa”, según sostuvo en declaraciones radiales.
No es la primera vez que los edificios escolares aparecen involucrados en situaciones de amenazas. Desde que comenzó el ciclo lectivo, hace apenas un mes, ya son seis los establecimientos que tuvieron que alterar su rutina después de haber recibido amenazas.
Unas quince cuadras separan a la escuelas José Mármol y Rosa Ziperovich. De acuerdo a la información de Fiscalía, los ataques contra los edificios escolares se desataron el sábado entre las 23.20 y las 23.45. Fueron los vecinos de barrio Ludueña primero y de Empalme después quienes advirtieron al 911 sobre la ráfaga de disparos que se escuchó esa madrugada en el barrio.
El personal policial de la comisaría 12, que se acercó a la Escuela N° 84 “José Mármol”, de calle Larrea al 300 bis, contó doce impactos de bala en el frente de la institución en rejas, vidrios y ventanas como así también varias vainas servidas en la vía pública. Del lado de adentro de las rejas encontraron dos notas amenazantes manuscritas.
Los policías que llegaron hasta la escuela Rosa Ziperovich, en tanto, se encontraron con seis impactos de bala en la fachada del edificio y, al igual que en la escuela Mármol, dos notas amenazantes manuscritas.
El Gabinete Criminalístico tuvo a su cargo el levantamiento de rastros, relevamiento de cámaras en la zona, toma de testimonios a vecinos de la zona y personas que puedan aportar datos de interés. El contenido de las notas encontradas se reservó para la investigación, no obstante trascendió que no estaban destinadas a personal de la escuela ni de la comunidad educativa. La investigación del caso quedó en manos del llamado “equipo para el abordaje de delitos cometidos con armas de fuego” de la Fiscalía Regional Segunda Circunscripción.