El joven implicado en el trágico accidente vial que resultó en la muerte de una madre y su hija en la costanera central de Rosario recibió el alta médica este jueves. Tras ser evaluado por especialistas, quedó bajo custodia policial y será sometido a una audiencia judicial programada para el viernes por la mañana.
Agustín L., conductor del vehículo, había sido trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) luego de protagonizar el incidente que le costó la vida a Tania Gandolfi, de 41 años, y su hija Agustina García, de 16. Según informaron fuentes oficiales, la fiscal Mariana Prunotto busca imputarlo por homicidio simple con dolo eventual, añadiendo dos agravantes que podrían derivar en una pena máxima de 25 años de prisión. La Municipalidad confirmó que el joven manejaba a una velocidad de 120 kilómetros por hora al impactar contra una columna en la intersección de las avenidas Arturo Illia y Presidente Roca. Aunque sobrevivió al choque, sufrió múltiples traumatismos que requirieron hospitalización. Por su parte, la joven que lo acompañaba también fue atendida en el Sanatorio Delta, pero no se ordenó su detención.
El monitoreo del tránsito urbano permitió reconstruir el recorrido del vehículo desde la intersección de Arijón y Ayacucho, en la zona sur de Rosario, hasta la costanera central. Además, los registros muestran que no fue el único caso de conducción temeraria: otro vehículo, una moto, fue captado circulando a alta velocidad en la misma zona, aunque hasta ahora no se logró identificar al conductor.
En cuanto a las víctimas, se supo que la familia de Agustina García estaba de visita en Rosario proveniente de Córdoba. El padre de la adolescente fue el único miembro que salió ileso del accidente, aunque se encuentra recibiendo atención psicológica. La hija menor de la pareja, Victoria, de apenas seis años, permanece internada en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde evoluciona favorablemente, aunque no recuerda los detalles del accidente. Si no surge ningún inconveniente, será trasladada al Hospital Pediátrico del Niño Jesús en Córdoba para continuar su recuperación.
Mientras tanto, otros familiares se trasladaron desde Córdoba a Rosario para colaborar con los trámites y brindar apoyo a los sobrevivientes. Este trágico episodio ha conmovido a la comunidad local, que exige justicia y un mayor control sobre la conducción imprudente en la ciudad.