Diego García, el padre que sobrevivió al trágico atropello ocurrido el pasado martes en la intersección de Presidente Roca y el río, rompió el silencio en medio de su inmenso dolor. Tras la pérdida de su esposa Tania Gandolfi, de 41 años, y su hija Agustina, de 16, Diego contó cómo enfrenta este difícil momento y cómo avanza la recuperación de su hija menor, quien fue dada de alta en Rosario el viernes pasado.
“Mi vida entera cambió en milésimas de segundo”, repitió una y otra vez durante su entrevista con el medio cordobés Arriba Córdoba. Diego, de 45 años, sobrevivió al impacto milagrosamente y, gracias a su rápida reacción, logró salvar la vida de su hija Vicky, de tan solo seis años. La pequeña continuará con su recuperación en Córdoba.
Diego calificó lo sucedido como “inexplicable” y pidió justicia por su familia, apuntando directamente contra Agustín López Gagliasso, el joven de 20 años que conducía el vehículo a más de 120 kilómetros por hora cuando embistió a su familia en la vereda. “Un chico de 20 años que es un asesino al volante, no hay otra explicación. Las penas de tránsito deben cambiar porque son insuficientes frente al daño que provocan”, expresó con indignación.
Para Diego, cualquier sanción que reciba el conductor será insuficiente. “Lo que hizo es mucho más grave que pasar unos años en la cárcel. No tiene idea del impacto de su irresponsabilidad. Fue una locura lo que hizo, una zona donde las familias caminan y trotan. Fue cuestión de milésimas de segundo; no hubo tiempo para nada. Es un milagro que estemos vivos”, reflexionó.
En medio de su duelo, Diego se mostró agradecido con los rosarinos que lo apoyaron durante este momento tan difícil y con los familiares y amigos que viajaron desde Córdoba para estar a su lado. Ahora, su prioridad es el bienestar de Vicky, mientras trata de encontrar una manera de seguir adelante en un escenario que le cambió la vida para siempre.