El jefe de Policía de la provincia, Miguel Oliva, anunció este jueves que se intensificarán los operativos de saturación en los barrios de la ciudad que registran más hechos de violencia.
“La violencia está muy elevada en los últimos días. Sí observamos que hay mutaciones en algunos tipo de delitos. Hoy vamos a tener reuniones con las fuerzas federales que consistirán en trabajar en una especie de anillo circunvalar concéntrico con fuerzas distribuidas en distintas partes de Rosario y centrando a la policía local en los barrios, con más presencia. También se está trabajando más organizadamente con las investigaciones y activamente con el Ministerio Público de la Acusación (MPA)”. indicó Oliva.
Respecto al parque de patrulleros en la ciudad, señaló que “en Rosario hay 152 patrulleros recorriendo las calles y con disponibilidad para cualquier evento. Sí, claro que necesitaríamos más vehículos para ahondar la operatividad, pero como número de base es un buen número. No olvidemos que además están las custodias y los corredores seguros”.
Acerca de si se tenían pensados operativos de saturación en barrios calientes como Empalme Graneros, Ludueña, Tablada o vía Honda -por citar algunos de los más complicados-, Oliva fue breve y concreto: “Sí, por supuesto. Llevamos día a día un mapeo muy dinámico de Rosario y sus barrios. Vamos a efectivizar patrullajes de alto impacto y preventivos”.
Consultado sobre si consideraba que la actitud de las bandas narcocriminales era de desafío a la fuerza policial, Oliva analizó: “No lo veo como actitud de desafío. Porque gracias a la operatividad de la fuerza tenemos muchas detenciones. De cada cinco o seis hechos hay tres que son esclarecidos. Hay un trabajo, si bien no se nota tanto, que tiene que ver con esto”.