En los últimos años, el debate acerca de algunos términos y construcciones en el lenguaje ha sido muy habitual. Por eso, lingüistas de Babbel, plataforma para el aprendizaje de idiomas, han querido hacer un repaso de esta cuestión en las distintas lenguas, para analizar en qué estado se encuentra y el papel crucial que juega en las reivindicaciones sociales por la igualdad y la inclusión.
“El género en el lenguaje es solo una de las muchas aristas que muestran los idiomas en su camino a la igualdad. El idioma siempre ha demostrado estar al servicio de las personas, que pueden -y deben- usarlo como su gran aliado para seguir creando entendimiento mutuo y seguir creciendo como sociedad.“, según ha manifestado Paula Fernández, Editora Senior de español en el departamento de Didáctica de Babbel.
Español: desdoblamiento de género y género neutro
Ya desde hace unos años, la forma masculina de las palabras, usada así tradicionalmente para referirse a ambos géneros, se ha convertido en uno de los puntos más controvertidos del uso del lenguaje y en un reclamo por parte de ciudadanos e instituciones. De hecho, de un tiempo a esta parte es habitual usar ambos géneros al hacer referencia a un colectivo indistinto de personas, lo que se conoce como desdoblamiento de género. También emplear el género neutro, una fórmula no reconocida de manera oficial con el que se quiere dar visibilidad a aquellos grupos demográficos con identidad de género y orientación sexual diferente a las masculinas o femeninas. Ambos recursos son cada vez más visibles pero el género neutro todavía no goza de reconocimiento oficial por parte de las instituciones ya que la RAE considera el masculino como género neutro.
Inglés: género neutro reconocido en el diccionario
El caso de la lengua anglosajona es bien distinto al del castellano, ya que entre sus pronombres personales se incorpora la tercera persona del plural, que siempre ha sido neutra (“they” y “them”). Pero eso no es todo, ya que los diccionarios norteamericanos Merriam-Webstern incluyen en sus páginas, desde el 2019, una acepción para el propio pronombre “they”, en el que se reconoce su función como fórmula neutra del lenguaje, lo que supone un precedente importante en la evolución de su uso. Sin embargo, la inclusión no solo se limita a los pronombres en el ámbito del lenguaje. También buena parte del léxico ha ido evolucionando y, por ejemplo, en vez de “fireman” (bombero/a) ha acabado instaurándose la fórmula “fire fighter”.
Francés: discrepancias con el Ministerio de Educación
Hace apenas unos meses, el diccionario Le Robert, una fuente de referencia para los francoparlantes, incluía en su edición online el género neutro “iel”, contracción de “il” y “elle”. La institución lingüística alegaba que “observaba un uso creciente del nuevo pronombre en los últimos meses”. Las reacciones sobre el tema causaron cierto revuelo en la opinión pública y el propio Ministro de Educación se pronunció al respecto para manifestar que la “escritura inclusiva” no formaba parte del futuro de la lengua francesa.
Suiza: las grafías que pueden acabar en referéndum
En el país cuentan con tres lenguas nacionales: alemán, francés e italiano. Si bien desde las instituciones públicas se ha promovido el uso del desdoblamiento de género y del género neutro ya desde los años 90, ha sido el uso de las grafías para reflejar todas las posibilidades dé género (como por ejemplo “”les député.e.s”), cuyo uso ha crecido exponencialmente en los últimos años, lo que ha desatado la polémica. Desde algunas entidades lingüísticas vinculadas al francés, han manifestado su intención de recoger firmas para poder convocar un referéndum, con el propósito de que estas grafías no se lleguen a oficializar. Sin embargo, las autoridades suizas pretenden introducir elementos del lenguaje neutro en la renovación de los libros de texto que se prevé para el año 2023.
Países nórdicos: a la cabeza del género neutro
En Noruega, en las elecciones del pasado septiembre, mientras tenía lugar un debate televisado de los candidatos, esta cuestión lingüística se coló en casa de los noruegos, ya que un espectador preguntó a los políticos sobre las intenciones de oficializar el pronombre neutro “hen”, como alternativa al femenino “hun” y el masculino “han”. Este hecho tuvo su efecto en el Consejo de la Lengua Noruega, que manifestó su intención de poder introducirlo en los diccionarios próximamente. Por su parte, en Suecia se promueve el uso tanto del desdoblamiento de género como del género neutro y, gracias al auge del movimiento feminista, ya introdujeron el pronomnre “hen” (fórmula neutra) en el diccionario, hace algunos años. Por último, Finlandia cuenta también con un pronombre neutro (“hän”) desde hace siglos, ya que aparece escrito por primera vez en el año 1543.