En el Coloso se vivió una noche tensa y con incidentes que no estuvieron relacionados directamente al empate de Newell’s contra San Lorenzo de este domingo sino con una cargada por el clásico rosarino efectuada desde un parapente que sobrevoló el estadio rojinegro con una bandera auriazul y arrojó panfletos a la cancha, cerca del final del primer tiempo, con inscripciones que aludían a la diferencia en el historial a favor del Canalla.
Esta secuencia desencadenó corridas, amenazas y golpes de simpatizantes identificados con la Lepra contra personas que estaban en el Coloso y habrían filmado con sus teléfonos celulares el momento de la caída de los papeles y el paso del parapente, para luego publicarlo en distintas redes sociales.
El epicentro de los incidentes fue la platea de la Visera Tata Martino, donde el club tuvo que desalojar la zona de los pupitres de prensa, en el codo entre la platea y la popular del Palomar, porque hinchas accedieron para agredir a quienes se encontraban allí. Pero eso no fue todo, ya que también hubo enfrentamientos entre barras y agentes policiales.
Posteriormente, fuentes de la Policía informaron que se logró la detención de cuatro personas que están sospechadas de haber llevado a cabo el plan con el parapente. Iban a bordo de una camioneta en la que transportaban el aerodino, la bandera que se mostró en la cancha y una caja con los panfletos, cuando los aprehendieron en la zona de San Martín al 400, en Granadero Baigorria.
Tras el partido y en la salida de los hinchas leprosos, en diferentes puertas del estadio se volvieron a registrar incidentes entre la policía y los simpatizantes.