Luego de que el Gobierno acepte varias modificaciones dentro y fuera del Congreso, el Senado aprobó en general la ley Bases con el voto clave de Victoria Villarruel tras un empate en 36. La titular de la Cámara alta también definió la aprobación de la delegación de las facultades excepcionales al Presidente. La gestión de Javier Milei se anota un importante avance en su proyecto emblema.
Aunque aún resta definir las modificaciones que propondrán distintos bloques opositores en los artículos más conflictivos. Una vez que se incorporen todos los cambios, el proyecto volverá a votarse en Diputados, dado que sufrió transformaciones del texto que habían aprobado en abril. Se espera que los legisladores acompañen en el mismo sentido la reforma fiscal.
La votación final fue empate en 36 votos con rechazo del bloque de Unión por la Patria junto a Martín Lousteau y los miembros de Por Santa Cruz, que luego se retiraron del recinto y permitieron la aprobación del resto de los capítulos del proyecto con el desempate de Villarruel, con excepción a la derogación de la ley del Estatuto de Trabajo del Viajante de Comercio. A la bancada del PRO, La Libertad Avanza sumó los acompañamientos de casi la totalidad de la Unión Cívica Radical y los legisladores que integran los espacios autónomos, que responden a intereses de los gobernadores provinciales.
Para garantizarse la aprobación, el Gobierno anticipó reformas en la lista de empresas privatizables (se redujeron a seis compañías públicas), el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones y la cantidad de organismos estatales que no pueden ser disueltos (que incluyen entidades científicas, culturales y energéticas). Se esperan modificaciones en el paquete fiscal: impuesto a las Ganancias, blanqueo de capitales y monotributo social.