Una joven vivió un calvario durante un viaje en Uber por Rosario. El pasado domingo la muchacha escapó de un intento de abuso por parte de un conductor de la aplicación de viajes durante un servicio que había pedido para volver a su casa. Tras realizar la denuncia a la policía, la víctima contó lo sucedido en sus redes sociales y señaló que está con “miedo de salir afuera”.
Anto Magali, como hace figurar en su Instagram y medio por el cual hizo público lo vivido, posteó este martes un carrete donde relató el feo momento que protagonizó el pasado domingo a las 6 de la mañana cuando pidió un auto a la empresa, que no está autorizada en la ciudad, para volver a su casa. “La verdad es que me alegraste la noche”, le dijo el hombre al inicio del servicio.
La muchacha, que viajaba en el asiento de adelante, contó que instantes después el sujeto que manejaba le dijo “mirá cómo estoy” y procedió a “tocarse”. “Empezó a tocarme las piernas, yo quería bajarme del auto y no podía porque estaban las puertas cerradas”, continuó la joven.
Finalmente, la víctima contó que al pasar por una estación de servicio comenzó a gritar y logró salir del coche. Ante esto, el conductor automáticamente se dio a la fuga. La chica agregó que ya realizó la denuncia y que la Policía se iba a encargar de obtener los datos restantes del agresor. “Si lo ven, tengan cuidado porque es un tipo peligroso y se ve que ya está acostumbrado a este tipo de cosas”, concluyó compungida.
El caso tomó relevancia en las redes sociales que en cuestión de horas diferentes usuarias comenzaron a aportar datos del conductor y confesaron haber padecido situaciones similares con el mismo chofer.
En un posteo siguiente, la joven mostró imágenes de la denuncia realizada contra Alberto Andrés F. Según la publicación, el hombre es un pastor de una iglesia en Álvarez y trabaja en UBER.
