Luego de la aprobación por parte del Concejo para finalmente dar luz verde a la habilitación de la polémica Torre Shopping en la zona norte de la ciudad, la concejala Fernanda Gigliani realizó un duro descargo a través de su cuenta de Twitter titulado “Torre shopping: la torre de la impunidad”.
“En octubre de 2010 se anunciaba la construcción, iniciada meses despues, de un edificio cuyo nombre comercial era el de Torre Shopping Condohotel, en la zona norte de la ciudad”, comenzó diciendo.
“Dos años después, comienza a escribirse una larga novela de la que hoy llegamos, tal vez, al último capítulo. En abril del año 2012 haciamos una presentación en el Concejo Municipal y realizábamos una denuncia pública, luego de que vecinos nos advirtieran que en la esquina de Bv. Rondeau y Juan B. Justo estaba en ejecución un edificio que por sus dimensiones iba a generar un impacto negativo sobre la infraestructura de ese sector del barrio. Buscamos la información, conseguimos la planimetría de la construcción y constatamos que trasgredía de manera desvergonzada las normas urbanísticas vigentes. Lo escandaloso de este caso en particular, fue el rol que tuvo la Municipalidad en la emisión de ese permiso de edificación”, continúa.
“Según el código urbano vigente en aquel momento, en esa zona la altura máxima que podía alcanzar un edificio era de 36 metros. el permiso de obra que fue otorgado por la Dirección General de Obras Particulares y refrendado por el SubSecretario de Gobierno y el Secretario de Planeamiento habilitó al privado a levantar hasta 67,24 metros de altura. Es decir, casi el doble de lo permitido. Esto, además, devino en una consecuencia lógica, los metros cuadrados construidos superaban con holgura lo que posibilitaba el Factor de Ocupación Total. Mas de 1300 metros cuadrados fueron construidos por encima de lo planteado en la normativa”.
“Esto derivo en nuevas presentaciones y pedidos de informes que realicé, sumado a una presentación judicial donde denuncié penalmente a las autoridades involucradas por incumplimiento del deber público. No obstante, la persistente exposición del caso en el Concejo como en medios de comunicación provocaron el apartamiento de su cargo de la entonces Directora de Obras Particulares (Arq. Funes). Tiempo después el entonces Secretario de Planeamiento (Barese) no renovó su cargo en la segunda gestión de Mónica Fein. Capítulo aparte merece la Justicia, que rechazó la demanda sin siquiera citar a los funcionarios ni al colegio de profesionales”, afirmó la edila.
“Ahora bien, el Permiso otorgado le daba una cuestionable legitimidad al exceso de altura, pero restaba resolver que hacían con los 1300 metros cuadrados construidos de más. Para esto y también para solucionar la necesidad de cocheras que requería el “blanqueo” del uso que iba a tener el edificio (no habían declarado que la construcción estaba destinada a un hotel, lo que les permitía realizar menos cocheras) los desarrolladores, que son los mismos de Tierra de Sueños I,II y III, decidieron la compra y unificación de parcelas con un predio lindero, lo que permitió reducir la cantidad de metros cuadrados en transgresión, realizar la construcción de cocheras y pedir una simple excepción para obtener el final de obras necesario para habilitar el hotel”.
“Un final dilatado en el tiempo, pero demasiado feliz para quienes han utilizado decenas de artilugios para obtener beneficios extraordinarios salteándose el cumplimiento de normas a las que sí están sometidos todos y todas los ciudadanos”.
“Lo más difícil de creer en este caso en particular, no es que el emprendedor haya construído por fuera de la normativa, sino que el mismo municipio haya permitido construir por fuera de la norma y lo haya querido justificar con falacias y no rectificar. Un hecho sin precedentes”.
“Ahora lo único que se debatió en el Concejo fue el pedido de excepción porque el hotel se excedió en el total de edificación en 168,46 metros cuadrados”.
“Pero a estas situaciones derivadas de el Permiso de Edificación mal otorgado se le suma en los últimos tiempos que los desarrolladores de este emprendimiento, que allá por 2010, ofrecieron y comercializaron departamentos para alquiler temporario o para renta mensual con servicios de hotelería, la original Torre Shopping Condohotel, transfirieron todo su activo a otra sociedad, Admife SRL, y crearon un fideicomiso hotelero sin notificar a los adjudicatarios que tenían boleto de compraventa. Lo que generó un nuevo frente de conflicto”.
“Cuando a fines del año pasado se inició la promoción del hotel Mercure con cartelería, se multiplicaron las denuncias, lo que derivó en la intervención municipal que comprometió no dar el final de obra hasta tanto no se zanjaran estos litigios judiciales”.
“Somos consientes que decenas de familias que invirtieron sus ahorros promovían que se vote en el Concejo Municipal la excepción que permita habilitar el hotel porque valoran un mal arreglo que a perderlo todo”.
“Y es entendible que quienes generaron y/o contribuyeron por acción u omisión a que todo esto sucediera sean los que levanten sus manos para resolverla”.
“Probablemente es el caso más escandaloso que tuvo la ciudad de Rosario. No puedo dejar de pensar que distinta hubiese sido la historia, si hubiésemos generado la indignación colectiva necesaria que movilice a los medios, las autoridades y la Justicia, cuando advertí lo que estaba pasando”.
“Hace tiempo tomamos la decisión de no acompañar este pedido de excepción por un posicionamiento ético. De ninguna manera vamos ayudar a trasparentar un trato desigual de la administración municipal y la trampa como modo de conducta”.
“Desde Iniciativa Popular no avalamos una historia de impunidad”, concluyó Gigliani.
TORRE SHOPPING: LA TORRE DE LA IMPUNIDAD.
— Fernanda Gigliani (@FerGigliani) November 18, 2022
Hoy, después de 10 años, parece que comienza el último capítulo de esta gran novela. Luego de tantas irregularidades, las denuncias que hicimos y nuestra insistencia por la transparencia, igualdad y justicia, triunfó la impunidad. pic.twitter.com/FuWeD62AcI