La Municipalidad, a través de la Secretaría de Control y Convivencia y con el acompañamiento del Instituto del Alimento, decomisó 540 kilos de carne en mal estado en un procedimiento que se llevó a cabo en una carnicería del barrio de Fisherton que funcionaba en un galpón sin habilitación y ningún tipo de condiciones para la actividad. El consumo de dicha mercadería revestía gran peligrosidad, por lo que fue destruida en el relleno sanitario.
El operativo se realizó esta vez en el marco de la denuncia que hizo una vecina del barrio, la cual fue seguida y tomada por la Dirección de Control de Proximidad. En tanto, la inspección y el secuestro se hicieron con el acompañamiento de agentes del Instituto del Alimento municipal y un efectivo policial.
En concreto, se decomisaron 540 kilos entre carne vacuna, cerdo, chorizo, morcilla, pollo y menudencias en mal estado. La intervención fue en una carnicería que funcionaba en un galpón en la zona del barrio de Fisherton, en el Distrito Noroeste.
Allí se detectó que el comercio tenía: habilitación vencida; falta de salubridad, higiene, carnet de manipulación y extinguidores; y un gran riesgo eléctrico. En resumen, no estaba en condiciones para ejercer la actividad.
Luego del pesaje correspondiente, la carne fue trasladada y depositada en el relleno sanitario para su destrucción y tratamiento como residuo para su descomposición. En tanto, el local fue clausurado y se le labró el acta de infracción correspondiente, que será derivada para el juzgamiento del Tribunal Municipal de Faltas.
Cabe recordar que el miércoles pasado la Secretaría de Control y el Instituto del Alimento ya habían decomisado también otros 280 kilos de carne en mal estado en procedimientos que, en este caso, se llevaron a cabo en cinco carnicerías de distintos puntos de la ciudad.