Rosario Central superó ampliamente a Caracas y el sueño de seguir en la Libertadores está más vivo que nunca. Este jueves por la noche goleó 4 a 1 -dos de Módica y uno de Lovera- al conjunto venezolano en el Gigante de Arroyito y se jugará una final ante Peñarol por la última fecha del Grupo G de la Copa Libertadores 2024.
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El inicio del cotejo fue todo del Canalla, el local comenzó presionando y jugando en el área rival. Lovera, la bandera de los ataques, probó dos veces de lejos: en la primera tapó el arquero y en el rebote no acertó al arco Módica mientras que el otro disparo fue al travesaño. El conjunto venezolano respondió a los 20, Pernía le picó a la espalda de Quintana y sacó un disparo cruzado que exigió a Borun más de la cuenta.
A los 28 estalló el Gigante, Lovera sacó un tiro libre exquisito que pasó por encima de la barrera y se colocó al palo más lejano del portero extranjero. Casi cinco minutos después, los de Russo ampliaron la cuenta: un desborde de Campaz terminó en un centro rasante que conectó Módica debajo del arco en un claro gol de nueve. Sobre el final de la primera etapa, Mallo tomó la lanza, en otra contra canalla, fue al ataque y estrelló la pelota en el poste.
El tercero de Central vino pasado los 10 del complemento, una pelota parada de la derecha fue capitalizada por el lungo delantero auriazul que definió de primera para poner el segundo de su cuenta personal.
Ahora el equipo de Arroyito se jugará una verdadera final en Uruguay por la última fecha de la fase de grupos, si el Auriazul gana, se mete en los octavos directo. En caso de no sumar de a tres, continuará en Copa Sudamericana ya que matemáticamente quedaría tercero.
A siete del final, el ingresado Echenique descontó con un remate cruzado para el 1-3. El marcador final no cerró Lo Celso con un tiro a colocar desde la medialuna para el 4 a 1.