“La vida muchas veces es injusta con quien menos lo merecen”, es una frase remanida pero válida en el caso de Camilo, el bebé de nueve meses trasplantado por una atresia biliar que estaba internado en el Sanatorio de Niños. Su familia informó en redes que el pequeño falleció durante la madrugada de este sábado.
A través de Instagram, la madre del menor posteó: “Hoy Cami descansa en manos de Dios. Hoy Cami se elevó al encuentro con su donante, sus ángeles y la vida eterna. Ganó la batalla, porque su paso en esta vida terrenal no fue ni será en vano, porque mamá y papá tienen trabajo que hacer”.
“Gracias hijo, por cambiar tantas vidas, por abrir corazones, por regalarnos tu presencia, tu sonrisa, tu bondad. Gracias por enseñarnos a vivir de otro modo. Nos llenaste de orgullo”, concluyó la historia publicada en la red social de las fotos.
El menor había sido diagnosticado a los cuatro meses de vida con una atresia biliar, un trastorno poco frecuente de las vías biliares, crónico y progresivo, manifestado en los primeros días de vida.
La semana pasada, horas después de que trascendiera el caso, apareció un donante compatible con Camilo y se procedió al trasplante. El bebé estuvo internado en cuidados intensivos durante varios días, pero lamentablemente falleció este sábado por la madrugada.