Una inspectora recibió una brutal agresión por parte de los dueños de una hamburguesería de La Plata, Buenos Aires, en el marco de un desalojo por una fiesta clandestina que había sido denunciada al 147. En la cuadrilla que arribó al comercio se encontraba una mujer que terminó recibiendo un golpe a la altura del pómulo tras un fuerte intercambio entre los agentes y los organizadores del encuentro.
El hecho ocurrió esta madrugada alrededor de las 04:00, cuando inspectores de Control Ciudadano fueron alertados por un llamado al 147 de Atención Vecinal, por ruidos molestos y el desarrollo de una fiesta clandestina en un local gastronómico.
Al llegar al negocio, una hamburguesería ubicada en calle 4 y 53, los inspectores observan que en la terraza se encontraban bailando unas 80 personas.
El supervisor se entrevista con uno de los propietarios de “Otilia Burgers” y le informa que su habilitación no corresponde con la actividad qué se encontraba realizando en la propiedad, por lo que debían desalojar el comercio. Los comerciantes informaron que se trataba de una fiesta privada y se negaron a cortar con el evento.
“Fue en ese momento cuando se generó una discusión y uno de los propietarios le dio un codazo en el pómulo al supervisor del operativo. Al mismo tiempo que la dueña del lugar comienza agredir a una de las inspectoras presentes, Verónica Bustos, generándole un corte en el rostro que requirió de atención médica”, informaron.