Los cuatro detenidos que dejó el incidente del parapente que sobrevoló el Coloso Marcelo Bielsa el pasado 3 de marzo fueron imputados a prisión preventiva por tres meses por “promover la formación de disturbios y desórdenes”, según dictaminó la fiscal Andrea Vega.
La acusación señala que los imputados “premeditadamente planearon el accionar, consistente en sobrevolar en un parapente, desplegar una bandera de Rosario Central con una inscripción, realizar dos vueltas completas sobre el estadio, y arrojar una cantidad indeterminada de panfletos” con una chanza futbolera impresa.
Previo al partido en el Parque Independencia, los imputados se condujeron en un utilitario, y tras armar el parapente, uno de ellos sobrevoló el estadio tirando panfletos amarillos y desplegando una bandera con frases en alusión al clásico ganado por Rosario Central.
Tras pasar por el Coloso, el parapente siguió hasta el predio denominado Puerto de la Música, en Granadero Baigorria, donde los esperaban dos de los detenidos para guardar los elementos utilizados, momento en que fueron detenidos por la Policía.
La fiscal dijo que el personal policial tuvo que intervenir de “todas las maneras posibles” para calmar y disuadir a hinchas rojinegros antes y durante el entretiempo, y al final del partido, y que esas intervenciones quedaron plasmadas en actas. Como la golpiza y el robo a un periodista, entre otros lesionados.