La Justicia de Rosario ordenó dos desalojos en propiedades ocupadas ilegalmente en distintos puntos de la ciudad.
En el primero de los casos se trató de un “desalojo express” dispuesto por el juez de circuito, Eduardo Arichuluaga. El magistrado solicitó a la demandante una cautelar y la mujer ofreció como caución real una propiedad.
El juez libró mandamiento al oficial de justicia a los fines de la entrega anticipada del inmueble que había sido usurpado. Lo resolvió en el marco de un juicio por desalojo que se había iniciado hace algunos meses.
Después de la contestación de la demanda el Código Procesal Civil y Comercial de la provincia habilita al juez al dictado de una medida de tipo cautelar. Significa que puede disponer el desalojo sin necesidad de culminar con el proceso para expulsar a la persona que usurpa. La vivienda estaba ocupada ilegalmente por un conocido de la propietaria.
La dueña de la propiedad, que fue patrocinada por la abogada Micaela Dominguez, va a recuperar su inmueble sin necesidad de esperar la culminación de las actuaciones judiciales. En este caso el magistrado priorizó el derecho de propiedad.
Para otorgar el “desalojo express” el magistrado tuvo en cuenta más que la verosimilitud, la certeza en el derecho de la dueña de la propiedad, por lo que Arichuluaga aplicó el artículo 517 del Código Procesal Civil y Comercial de la provincia de Santa Fe.
En el segundo caso, la Justicia rosarina dispuso como medida cautelar la restitución al propietario de un inmueble de la zona norte de Rosario que también estaba usurpado.
La jueza penal, Valeria Pedrana, ordenó el cese de la ocupación ilegal en un plazo de 30 días y que la propiedad quede libre de personas y objetos. Si los ocupantes no cumplen la decisión judicial serán desalojados por la fuerza pública.
La medida de desalojo deberá ser cumplida por personal policial de la comisaría que tiene jurisdicción en la avenida Eudoro Carrasco al 2.700, frente a la Rambla Catalunya.
En el fallo, la magistrada resolvió que cuando la propiedad quede desocupada se deberá poner el inmediata posesión del dueño.
Además, dispuso que se brinde la seguridad necesaria al propietario para poder realizar el cerramiento del terreno.
El dueño del inmueble fue patrocinado por los abogados Francisco Scrifignano y Susana Andalaf.
La mujer ocupa una vivienda lindera, pero había efectuado un boquete para ingresar al local que usurpó hace casi 2 años. La causa penal por usurpación continúa su trámite.