Este jueves, tanto el Senado como la Cámara de Diputados de Santa Fe llevaron a cabo sesiones extraordinarias que, posiblemente, marcaron el cierre de un año legislativo cargado de debates y resoluciones importantes. En estas últimas reuniones, se aprobaron dos leyes de gran relevancia: la ley tributaria y la que regula el boleto educativo gratuito.
Ambas normativas, más orientadas a definir estructuras a largo plazo que a resolver cuestiones inmediatas, pasaron a formar parte del marco legal de la provincia. En particular, la ley tributaria, impulsada por el Poder Ejecutivo, recibió sanción definitiva en Diputados con una votación ajustada: 35 votos a favor y 9 en contra.
Esta normativa establece los impuestos que regirán en Santa Fe durante el próximo año, incluyendo un incremento promedio del 22% en el impuesto inmobiliario. Aunque la cifra puede parecer moderada, generó críticas, especialmente de Walter Agosto, exministro de Economía de la gestión Perotti. Según Agosto, este aumento supera significativamente tanto la inflación proyectada como el crecimiento salarial, lo que podría traducirse en una caída en la recaudación, contraria al objetivo del gobierno provincial.
Una particularidad destacable de esta ley es que incluye la adhesión de Santa Fe al blanqueo de capitales propuesto por la Nación, así como al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). Estas medidas buscan fomentar la transparencia fiscal y estimular inversiones de magnitud en el territorio santafesino.
Por otro lado, se otorgó carácter legal al boleto educativo gratuito, un beneficio que ya venía implementándose por decreto. La nueva ley garantiza mayor estabilidad jurídica a este programa, clave para facilitar el acceso a la educación en la provincia.
Con estas resoluciones, la Legislatura de Santa Fe culmina un año de intenso trabajo, dejando en evidencia la importancia de equilibrar políticas estructurales con las demandas inmediatas de la sociedad.