La trabajadora reclamó a la ART prestaciones en virtud de la enfermedad profesional contraída en dicha institución , Tenosinovitis de Quervain muñeca izquierda y Neurodicitis del nervio cubital brazo izquierdo, al desarrollar sus tareas de extraccionista de sangre durante 5 años en jornadas de 6 horas y media diarias, realizando aproximadamente 30 extracciones por hora, durante cada hora de trabajo, comprometiendo ambos codos, ambas muñecas, palmas y dedo mayor.
La ART desconoció el carácter profesional de las patologías denunciadas.
Ante el rechazo se iniciaron actuaciones administrativas ante la Comisión Médica Nº 7 de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo por rechazo de la Contingencia y dicho organismo ratificó el rechazo otorgado por la ART.
Debió ser intervenida quirúrgicamente por dichas patologías y por quiste en dedo mayor. La cirugía se le practicó en un sanatorio céntrico el 30 de setiembre de 2022. Luego cursó rehabilitación con persistencia del dolor articular. Finalmente con el patrocinio de la abogada Nerina Barbero recurrió a la vía judicial iniciando acciones contra la ART ante el Juzgado de Primera Instancia en lo Laboral de la 5° Nominación de Rosario.
La pericia médica oficial determinó que la mujer padece de una incapacidad del 13,76% de la total obrera de tipo parcial y permanente concluyendo el perito médico que las afecciones de la actora se relacionan causalmente con el tipo de actividad desarrollada para el empleador. En consecuencia la ART celebró acuerdo transaccional con la trabajadora ofreciendo abonar una suma de dinero en concepto de indemnización. El acuerdo fue homologado por el juzgado interviniente.
