Horas de drama y extrema violencia se vivieron este fin de semana en el fútbol mexicano, ya que los hinchas del Quéretaro y Atlas se trenzaron en una brutal batalla campal que terminó con al menos 17 muertos -no oficial hasta el momento- y unos 22 heridos informados por las autoridades. El partido y la jornada nueve de la Liga MX fueron suspendidos. En tanto, las autoridades evalúan una fuerte sanción contra el club local, que podría terminar con la desafiliación.
Todo comenzó al promediar el segundo tiempo del partido entre ambos clubes, cuando simpatizantes de los “Gallos Blancos” de Querétaro agredieron a un minúsculo grupo de Atlas, equipo que dirige el DT argentino Diego Cocca. Ante esto, las fuerzas de seguridad resultaron “desbordadas por los hechos y optaron por hacer saltar a los aficionados al campo de juego, a manera de protección”, según el periódico Récord.
De esta manera, cientos de espectadores invadieron la cancha, mientras se disputaba el cotejo, que ganaba el elenco de Guadalajara por 1-0, con gol del argentino Julio Furch.
Además, algunos hinchas que entraron al campo “siguieron con la violencia sobre el césped, buscando golpear a sus rivales”, según apuntó la citada publicación. Incluso, un grupo de barras de Querétaro, equipo que es conducido por el argentino Rolando Hernán Cristante, entró con navajas en mano “y procedió a llevarse las redes de ambos arcos, a manera de trofeo de guerra”.
Los informes oficiales del sábado dieron cuenta de 22 aficionados heridos en estos hechos. De acuerdo con la Liga MX todas “las personas lesionadas fueron trasladadas en ambulancias a hospitales cercanos”. Lo cierto es que voces extraoficiales señalan que la cifra de muertos es de al menos 17, aunque las autoridades todavía no han comunicado fallecidos.
“Estoy anunciando la suspensión de los partidos restantes de la jornada 9 a celebrarse este domingo en solidaridad con las personas afectadas en el encuentro de este sábado y con la preocupación de que estos actos no se presenten más”, dijo Mikel Arriola, presidente ejecutivo de la Liga MX, en un video difundido por el organismo en las últimas horas.
En nombre de la Liga MX, su presidente ejecutivo se comprometió a realizar “una revisión a fondo de nuestros protocolos de seguridad y de la manera como trabajamos en conjunto con las autoridades de cada estado y municipio para generar un entorno seguro y familiar”.
La sanción máxima que contempla el reglamento del fútbol local son cinco partidos de veto al estadio, aunque las autoridades estarían evaluando la desafiliación del Querétaro.
Para el domingo estaban programados los partidos: Pumas-Mazatlán, Pachuca-Tigres, y Tijuana-Atlético de San Luis.