Un micro de larga distancia que se dirigía de Rosario a Córdoba fue apedreado este lunes por la tarde y provocó que estallaran los vidrios de una ventanilla. Afortunadamente no se registraron heridos.
El hecho ocurrió a la altura de Funes, cuando un micro de larga distancia fue atacado a piedrazos por desconocidos, como consecuencia estalló una ventanilla del lado derecho donde estaba sentada una joven que iba a dar clases a Cañada de Gómez.
Tras el impacto y el ruido que causó el estallido de los vidrios, los choferes del micro siguieron viaje hasta el destacamento de Gendarmería de la ciudad de Funes.
“Estaba sentada con los auriculares escuchando música. De pronto sentí el impacto y los vidrios que se me vinieron encima”, contó la pasajera que viajaba en el asiento en el que estallaron los vidrios de la ventanilla.
“No me pasó nada pero, si esa misma piedra me pega en la cabeza, me la destroza”, sentenció, y recalcó: “A mí no me pasó nada, salvo por el hecho de que estoy llena de astillas”.
La joven, que era la primera vez que viajaba a Cañada de Gómez para dar clases en la universidad, señaló que “no se puede transitar más así. Ahora voy a pensar qué hago, porque vas a trabajar pero no sabes si vas a recibir un piedrazo en la cabeza y terminar internada o de otra manera”.