La avenida Circunvalación, una de las arterias más transitadas de Rosario, enfrenta serios problemas de mantenimiento que han generado preocupación entre vecinos y conductores. A pesar de su importancia estratégica, los trabajos necesarios para mantener la ruta en condiciones adecuadas continúan siendo objeto de negociaciones entre el municipio y el gobierno nacional.
Con una extensión de 30 kilómetros, la Circunvalación bordea la ciudad y conecta numerosos barrios de Rosario con localidades vecinas. Además, es un punto clave para el tránsito hacia rutas nacionales como las autopistas a Córdoba y Santa Fe, el puente Rosario-Victoria, y las rutas 11, 34 y 33. Se estima que cerca de 100 mil vehículos circulan por esta vía cada día, lo que subraya su relevancia en la red vial de la región.
Un mantenimiento insuficiente
Actualmente, la avenida está bajo la gestión de la empresa estatal Corredores Viales. Sin embargo, el deterioro y la acumulación de maleza han generado críticas y demandas de soluciones urgentes. A finales de octubre, el gobierno nacional presentó el programa Red Federal de Caminos, que busca concesionar rutas nacionales al sector privado como parte de un plan para reducir el déficit fiscal y mejorar la transparencia en los gastos. Este esquema incluye el tramo conocido como “Río Paraná”, que abarca más de mil kilómetros y afecta a varias provincias, incluidas Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires y San Luis.
Mientras se define el futuro de este plan, el municipio de Rosario ha iniciado gestiones para garantizar el mantenimiento básico de la Circunvalación. Según datos de la administración local, las tareas de limpieza y desmalezamiento de la arteria requieren una inversión mensual cercana a los 360 millones de pesos. Ante esta situación, el intendente Pablo Javkin y su equipo han planteado al gobierno nacional la posibilidad de asumir temporalmente estas tareas, siempre que se garantice el financiamiento correspondiente.
Acciones recientes y desafíos pendientes
En los últimos meses, algunas conversaciones entre el municipio y la Nación comenzaron a rendir frutos. A principios de este mes, se reanudaron los trabajos de desmalezamiento y corte de césped en las banquinas, después de casi un año de gestiones. Sin embargo, estas acciones aún no cuentan con un marco de acuerdos que permita su continuidad de manera regular.
Entre las opciones evaluadas para asegurar el mantenimiento de la avenida, se considera extender el contrato de la empresa actualmente a cargo, convocada por Corredores Viales, o bien que el municipio active sus propios prestadores, con el compromiso de que los costos sean cubiertos por el gobierno nacional.
Una solución a medias
Desde el municipio, los funcionarios han insistido en que lo más urgente es resolver el mantenimiento inmediato de la Circunvalación, dejando el debate sobre posibles privatizaciones y la instalación de peajes para una etapa posterior. Mientras tanto, la comunidad espera que estas gestiones conduzcan a una solución definitiva que garantice la seguridad vial y el correcto estado de esta arteria fundamental para Rosario y la región.
La situación de la avenida Circunvalación pone en evidencia la necesidad de una coordinación efectiva entre las autoridades municipales y nacionales, así como una planificación que contemple el impacto económico y social de cualquier decisión futura sobre esta infraestructura vital.
