La secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, anunció que a partir del 1° de agosto quienes tengan altos ingresos o no hayan solicitado tarifas subsidiadas, recibirán boletas con aumentos estimados del “150% interanual”.
Por su parte, confirmó que los subsidios para el pago de los servicios de luz y gas continuarán vigentes para todos aquellos consumidores que demuestren ingresos netos menores a los $730.000.
“El Estado seguirá acompañando a la clase media y a los sectores de bajos ingresos, solamente tendrán costo pleno aquellos que reciben un salario superior a los $730.000. Se trata de una distribución más justa de los subsidios”, señaló la funcionaria.
En el caso de los sectores de menores ingresos, aclaró que la suba tarifaria “estará muy por debajo de la inflación. Lo importante es cuidar a los sectores de bajos ingresos hasta que haya una recomposición salarial”.