Las cárceles de Piñero y Coronda y una serie de domicilios particulares de la zona oeste de la ciudad y de la localidad de Cañada de Gómez fueron allanados este jueves a la mañana por la División Antidrogas de la delegación de la Policía Federal de Rosario, por orden del juez Carlos Vera Barros, y su secretario Hernán Flores. El objetivo fue dar con parte de la cúpula de Los Monos. Se los acusa de formar parte de una presunta red de comercialización de estupefacientes que digitaban los Cantero desde prisión, en conjunto al mando de “Guille” Cantero, el máximo líder preso en Marcos Paz.
Junto al “Viejo” Cantero fueron requisados Ariel Maximiliano “Chanchón” Cantero y Alexis Claudio “Tartita” Schneider, que son hijos del fundador histórico de Los Monos que también están tras las rejas. Pero también fue arrestada Bárbara, otra hija de Cantero Padre, en uno de los procedimientos en la zona de Rivero y Magallanes, en la zona oeste. Se incautó dinero en efectivo y una escasa cantidad de cocaína. Hay 13 detenidos en total.
Si bien Los Monos operaron históricamente en la zona sur de Rosario, “Chanchón” Cantero y “Tartita” Schneider serían los operadores de la estructura en el oeste de la ciudad.
“Chanchón” Cantero, de 23 años, fue condenado en marzo de 2020 a 14 años de cárcel por haber asesinado a Cristian Ibarra, un policía de Investigaciones de 29 años. Lo mató dentro de su auto en Larralde y Dean Funes, en la zona oeste. Al momento de la investigación, el fiscal de Homicidios Dolosos Miguel Moreno afirmó que el agente había vendido droga en la zona del complejo Fonavi de Monte Flores y Brasil, territorio de Los Monos en el distrito oeste, y no había realizado un arreglo económico para operar.
El fiscal Moreno dijo en la audiencia donde imputó a “Chanchón” que el hijo del “Viejo” Cantero le cobraba la zona al policía Ibarra. El día del crimen –22 de julio de 2019– supuestamente iban a encontrarse para arreglar “problemas que habían surgido en el Fonavi” por la venta de droga, pero cuando el agente llegó en su auto, se subió “Chanchón” y otro sicario y lo mataron de ocho disparos.