El pediatra hepatólogo, Alejandro Costaguta, el médico que lideró el equipo de profesionales que llevó a cabo el trasplante de de hígado de Pablo Álvarez, el niño que recibió un órgano hace 9 días, después de que le diagnosticaran una hepatitis aguda, recibirá el alta en las próximas horas.
El caso tomó gran repercusión pública, al ser calificado como el primer caso de hepatitis aguda de la Argentina. Las autoridades sanitarias y especialistas señalaron que se trataba de un caso aislado ya que no se habían detectado otros chicos con el mismo problema en la región, sin embargo el impacto en la población fue inmediato.
El Cudaio, que depende de Incucai y del Ministerio de Salud de Santa Fe, supervisó y siguió de cerca todas las instancias, como sucede con cada trasplante que se hace en Rosario.
La semana pasada, en una intervención que demandó 12 horas, se logró injertar un órgano proveniente de donante fallecido de La Pampa.