La familia de Pedro Eduardo Rosales, el recluso que falleció en la cárcel de Coronda y del cual sus familiares desconocen su deceso, piden la exhumación del cádaver que fue enterrado en la fosa común del Cementerio Municipal de dicha localidad.
Según un informe de la Municipalidad de Coronda, el cuerpo de Rosales fue enterrado a las 11.30 del 13 de julio pasado -dos días después del deceso en el penal- , en una de las fosas de la manzana 18 de la necrópolis.
Sin embargo, la familia del convicto tiene dudas sobre si los restos enterrados son los de Rosales, por lo que tienen previsto pedir la exhumación del cadáver. La solicitud será realizada a través del abogado de la familia, Raúl Sartori.
Según estableció la familia denunciante, el recluso -quién estaba allí desde el mes de abril- falleció entre el 10 y 11 de julio mientras se encontraba alojado en un pabellón de la cárcel de Coronda, ubicada a 40 kilómetros de la ciudad de Santa Fe.
Dentro del penal, el hombre de 42 años fue visitado por una hermana que notó una desmejora en su salud. Se desconoce las circunstancias del fallecimiento del hombre. El fiscal de turno, Alejandro Benítez dispuso la autopsia del cuerpo debido a que fue un deceso en contexto de encierro.