A 13 días de uno de los crímenes más resonantes en la historia rosarina, el cadáver del ex líder de la barra brava de Rosario Central, Andrés “Pillín” Bracamonte sigue en una cámara de conservación en el cementerio de Pérez, custodiado por agentes policiales.
Sus familiares esperan la orden judicial para realizar la cremación. Pero este acto no será autorizado por el fiscal a cargo de la causa hasta que se obtenga el informe final de la autopsia.
El asesinato del dia 9 de noviembre, en inmediaciones del estadio Gigante de Arroyito desprende distintas historias en paralelo: Por un lado, lo que implica este crimen en el mapa delictivo de la ciudad; además de lo que significa para la organizacion de la barra del club Canalla. Por otro lado, en lo vinculado a la intimidad de sus allegados, se siente la larga espera para darle un destino definitivo a los restos de Bracamonte.