A siete años de la aprobación de la ordenanza que prohíbe la entrega de bolsas plásticas en los supermercados de la ciudad, en el Concejo avanza un proyecto que va más allá y plantea eliminar las bolsas plásticas de todo tipo en comercios y negocios de Rosario, con la única excepción de las de rollo o bobina, usadas mayormente en verdulerías y carnicerías. La medida, que busca extender la implementación de las bolsas ecológicas, ya genera polémica entre los sindicatos y empresas que fabrican este tipo de elemento.
La iniciativa es impulsada por la concejala Mónica Ferrero (bloque Socialista), quien retomó una idea que había motorizado en su momento el ex edil Lisandro Zeno.
El proyecto, que ya tuvo proveído en la comisión de Ecología, impulsa la prohibición de la entrega y comercialización de bolsas en locales comerciales de la ciudad denominadas de “última bolsa descartable”. Se trata de bolsas que sólo se usan para transportar compras, de diversos tipos, aunque todas fabricadas en polietileno o plásticos no degradables. Fuera del proyecto quedaron las bolsas de rollo o bobina, que se suelen usar para llevar alimentos que no estén envasados, mayormente en verdulerías y carnicerías.
Como contrapartida, la eventual ordenanza permite a los locales comerciales que se encuadren en la misma (deberá ser la Intendencia quien determine qué rubros quedan sujetos) la posibilidad de comercializar bolsas reutilizables como las que se usan para ir al supermercado. Además, podrán fomentar esto pidiendo a los clientes que lleven sus propias ecobolsas.