Santiago es uno de los hermanos que fueron salvajemente agredidos por una patota en el marco de una fiesta realizada en la plaza de Pueblo Esther luego de una discusión que se generó durante la misma. Un empujón involuntario y una bebeida que se vuelca generó la más violenta de las reacciones por parte de una patota de adolescentes y un adulto.
La desgarradora escena fue relatada por la madre del joven al móvil de Canal 3, mientras de fondo se sostenía un cartel que rezaba “Salvador fue casi otro Fernando Báez Sosa”.
“Esa noche yo estaba durmiendo y mi hijo menor, Salvador, había ido con unos amigos a la Fiesta de la plaza del Tanque” manifestó la mujer, quien agregó que todo comenzó en dicho evento cuando su sobrino más chico, Luciano que estaba alcoholizado, se chocó con otro chico en la fiesta y le tumbó la bebida, lo que generó que en ese primer encontronazo, apareciera un grupo de 15 o 20 chicos que tiraron al piso al Darío, hijo mayor de la mujer que realizó la denuncia a quien golpearon salvajemente en el suelo, arrancándole incluso un arito de la oreja.
Finalmente Dario pudo escaparse a su casa todo golpeado y ahí fue que aparecieron los agresores en la puerta de la casa a bordo de una camioneta que manejaba el padre de uno de ellos. Allí Salvador, hermano de Dario fue el blanco esta vez de los golpes que llegaron de manera más salvaje: “El hombre mayor de edad lo agarrò a mi hijo de atrás y su hijo Alexis le tiró dos ladrillazos y le pegó en la cara, provocándole fractura de maxilar. Mi hijo escupia sangre, perdió un diente y tenía el resto de los dientes flojos”.