Un lobby desproporcionado y de último minuto está ocurriendo en los despachos del tribunal.
El encargado de alterar todo el orden judicial y conseguir excepciones a la ley es Gustavo Isaac.
El lobbysta tiene que lograr que Mariano Ríos Artacho, fiscal que interviene en la causa que iniciaran los herederos de Leo Grinschpun contra Gerardo Werthein por estafa, y quien lo imputó e indagó, pida sorpresivamente y en 48 horas, su desvinculación del juicio penal.
Y la razón es que el indagado se candidatea para ser el próximo embajador en Estados Unidos durante la gestión de Milei, y semejante denuncia no lo estaría ayudando.
Claramente a contramano del discurso nacional, esta gestión a favor de la casta, tiene en vilo a varios, acompañado por el silencio de los principales medios de la ciudad que también son testigos de la situación y enmudecen.
Quedan 48 horas para conocer si Isaack podrá quebrar la voluntad del fiscal y allanar el camino de Werthein para convertirse en embajador.
Pero la pregunta que flota en el aire y que realmente importa es ¿Quiénes del poder judicial de santa fe, incluida la corte, están alineados a la misma gestión?.
