El robo de elementos de bronce sigue siendo una constante en la ciudad de Rosario en donde picaportes, cables y distintos objetos son sustraídos para luego ser vendidos en el mercado negro.
En este contexto los cementerios no son la excepción y a los hechos de vandalismo que suceden en forma regular, se sumó esta vez el robo de dos toneladas de dicho metal.
“Nosotros pedimos policía para trabajar tranquilos. Pero a la noche no están y trabajan tranquilos los ladrones. Sólamente en el cuarto de sepultureros nos robaron lunes, martes, miércoles y jueves. Todos los días un destrozo nuevo” aseguró uno de los trabajadores al móvil de Canal 3.
“Es el robo y destrozo más grande que hemos tenido. Yo hace 20 años que estoy y nunca viví esto” aseguró uno de los trabajadores, quien agregó que “vemos como entran los familiares y salen llorando al ver cómo están los nichos. En ese sector que atacaron directamente no hay luz, entonces no se ve nada y ellos trabajan tranquilos”