En un partido cargado de emociones, Rosario Central le regaló la mejor despedida a su ídolo y máximo goleador del club, Marco Ruben, quien tuvo una despedida soñada. El Canalla le ganó 3 a 1 a Estudiantes en el cierre de la fase de grupos de la Copa de la Liga Profesional. La fiesta fue completa para el goleador que dio una asistencia y convirtió un gol para estirar a 105 sus gritos con la entidad de Arroyito.
Las emociones comenzaron desde temprano con cánticos de los hinchas canallas hacia su ídolo, el precalentamiento se vivió como un partido. Por su parte, el artillero agradecía los gestos que llegaban de la tribuna.
Ya en el partido, Ruben pudo marcar a los 8 con un cabezazo que salió cruzado tras un centro bombeado de Luciano Ferreyra. Un minutos más tarde, todo el estadio cantó: “Olé, olé, olé, olé… Marco, Marco…”, en alusión al minuto que representaba el dorsal de la camiseta del histórico anotador del club.
El primer gol llegaría cuatro minutos más tarde, el nueve auriazul descargó para el Pupi que de derecha la colgó al segundo palo. Pasada la media hora de juego, un centro rasante de Damián Martínez fue interceptado por Alejo Véliz que le cambió la dirección a la pelota para el 2 a 0.
La ovación fue total a los 8 del complemento, porque llegó el tercero de la mano del protagonista de la noche. De media vuelta, Ruben ponía el 3 a 1.
El descuento de la visita vino a quince del final a través del juvenil Gonzalo Piñeiro.
Central se despide de un pobre torneo en el que solo consiguió 4 victorias.