Después de una prolongada sequía que afectó al centro del país, la tan esperada lluvia se convirtió en una bendición y un desafío en el inicio del proceso electoral en Santa Fe capital este domingo 22.
En algunas escuelas, la lluvia provocó cortes de energía eléctrica durante algunos minutos. Sin embargo, lo que más preocupó fue la entrada de agua en numerosos establecimientos. Autoridades de mesa, fiscales, efectivos de seguridad y voluntarios que llegaron temprano para votar se unieron para sacar el agua de las instalaciones con los recursos disponibles.
Un ejemplo de la situación se vivió en las inmediaciones de la escuela secundaria Lourdes, donde las áreas circundantes quedaron inundadas. La directora de la institución, Sandra Delfino, comentó: “Las mesas se conformaron a tiempo con las autoridades. El problema es el agua”, mientras observaba la falta de votantes en la zona. Esta situación se replicó en muchos otros lugares.
En algunas instituciones, se tuvieron que cambiar las ubicaciones de los cuartos oscuros y las mesas de las autoridades, pero en todos los casos reinó la buena voluntad para asegurar que el proceso electoral comenzara con normalidad. Hasta media mañana, la afluencia de votantes era escasa.
La ciudad de Santa Fe ingresó en el “Protocolo 1” debido a las inundaciones en las calles, lo que refleja la magnitud del desafío que representa la lluvia en medio de un proceso electoral vital.