La filial rosarina de la empresa Mail Express está bloqueada por un piquete a raíz del despido de seis trabajadores de la sucursal de Santa Fe de la firma de origen mendocino. El piquete fue impulsado por el gremio liderado por Sergio Aladio que le provocó una pérdida de $6 millones mensuales, por el fin de la contratación de Mercado Libre. El ministerio de Trabajo de Santa Fe intervino y dictó la conciliación obligatoria hasta el próximo 5 de octubre, plazo a partir del cual la empresa debería reincorporar a los trabajadores.
El origen del conflicto es el despido de trabajadores que la empresa tiene en la capital provincial. Como la mendocina perdió un cliente de distribución de facturas de gas, decidió discontinuar los contratos de los empleados que se ocupaban de esa tarea. El sindicato de Camioneros, liderado por Sergio Aladio, presionó para reincorporar a los trabajadores, pero la compañía logística se puso firme aduciendo que “no tiene trabajo para darles” y entró en tensión con el gremio. “Retomarlos sería como tenerlos becados. Es algo que nos pasa en otras sucursales, no podemos aguantarlo”, dijo Lucas Le Donne, titular de Mail Express.
La empresa, que empezó como una mensajería tradicional, tiene hoy el foco del negocio y sus principales clientes en el e-commerce y es a raíz de ese cambio de tendencia que puso en marcha una reestructuración interna. “Hicimos despidos en todos los términos de la ley, con el pago de indemnizaciones correspondientes”, explicó el empresario.
Ante la negativa de reincorporar el personal, el gremio camionero bloqueó días atrás las operaciones de la planta de Rosario, donde salen los paquetes que la compañía distribuye para Mercado Libre. Al tercer día del conflicto, Mercado Libre optó por suspender la contratación del servicio hasta tanto el conflicto esté resuelto. Hoy, con el cuarto intermedio que implica la conciliación obligatoria, la compañía volvió a funcionar de manera normal pero el panorama a futuro es incierto.
“La empresa estuvo a punto de perder un contrato importante con Mercado Libre, que por suerte le volvió a dar la carga. Pero no hay demasiado tela para cortar, si después del 5 de octubre se reactiva el bloqueo, el cliente se va”, describió Verónica Razzini, empresario rosarina titular de Razzini Materiales, quien desde su rol al frente Movimiento Empresarial Anti Bloqueos (Meab), sigue de cerca la evolución el conflicto. De caerse el vínculo comercial con Mercado Libre, la mendocina tendría decidido cerrar la sucursal de Rosario, ya que no sería rentable mantener las operaciones en la ciudad solo con los contratos de mensajería. De esa manera, unos 40 choferes podrían quedarse sin trabajo y otras 20, dedicadas al sector postal, peligran en su puesto.