Las imágenes de la jornada del lunes con una pueblada de los vecinos de Cabal al 1300 bis, quienes cansados de vivir en medio de un territorio copado por los narcos, decidió tumbar los búnkers por fuerza propia recorrieron el país. Lejos de calmarse las aguas con ese hecho, la amenaza directa por parte de los narcos no tardó en llegar.
Primero fueron algunos vecinos quienes alertaron sobre mensajes intimidatorios que recibían en formato papel y mediante whatsapp. Hasta la familia de Máximo, el niño asesinado el pasado domingo sufrió crudas amenazas por mensajería digital.
Sin embargo, lo que más dolor e impotencia causó fue el video que cerca del mediodía empezó a llegar a los teléfonos de vecinos del barrio Los Pumitas, quienes fueron amenazados directamente por un sicario, quien con una máscara para cubrir su rostro y mostrando armas y municiones amenazó en forma directa contra la vida de los vecinos que ayer velaron a un niño de 12 años y ruegan por la vida de los otros tres que fueron alcanzados por una balacera el pasado domingo.