Una empresa financiera está en el foco de la Justicia por estar acusada de múltiples estafas piramidales que se llevan a cabo a través del pedido de inversiones en dólares con una criptomoneda argentina prometiendo una asombrosa tasa de retorno del 7.5% mensual. Este sistema tuvo su destello de popularidad luego de varias publicidades mediáticas. En Rosario hay preocupación porque señalan que este mecanismo ya está captando futuras víctimas, aunque hasta el momento no se han constatado denuncias en el Ministerio Pública de la Acusación (MPA). ¿Quien está detrás de esa nueva gran ilusión monetaria?
El fiscal Fernando Dalmau, de la Unidad de Investigación y Juicio, alerta que los que inviertan en este fondo terminarán con vaciados de inversiones por la imposibilidad de afrontar los rendimientos prometidos por la firma.
En ese sentido, advirtió que Zoe Capital está actuando sin autorización de la Comisión Nacional de Valores (CNV) habría una acción contra el artículo 310 del Código Penal, que reprime al que realice actividad de intermediación financiera sin convalidación oficial, con prisión de uno a cuatro años y severas multas.
Desde el MPA sostienen que este tipo de estafas podrían salir a la luz en unos meses, ya que el mecanismo implica un tiempo considerable de espera hasta efectivizarse el engaño monetario. De acuerdo al conocimiento del organismo, los responsables de llevar adelante estas estafas ya están captando fondos de ahorristas, a través de llamadas telefónicas o de anuncios en redes sociales como Instagram o Twitter.
Se trata del esquema Ponzi, una forma de estafa que atrae inversores y paga utilidades a inversores anteriores con fondos de ahorristas más recientes. El sistema lleva a creer que las ganancias provienen de actividades comerciales legítimas, como venta de productos o inversiones exitosas. Hasta que el corte de la cadena produce un colapso que arrastra en masa a los que pusieron fondos.
La financiera Zoe Capital tiene como CEO a Leonardo Cositorto, de la criptomoneda Zoe, quien se presenta en su página web como experto con veinte años de experiencia en coaching ontológico. Además, la firma inversora fue sponsor del club Deportivo Español y del entrenador Caruso Lombardi.
Dalmau explica que el modelo propuesto parece encubrir los imposibles rendimientos financieros que prometen con venta de cursos. Según la cuenta, con 100 dólares se puede acceder a un curso de coaching ontológico, en tanto que con 400 dólares además de la capacitación se invita a invertir en una empresa cripto de crecimiento internacional.
Cabe recordar que el 22 de diciembre pasado la Comisión Nacional de Valores, a raíz de una publicidad que invocó el nombre de la entidad que supervisa inversores en finanzas, aclaró que Generación Zoe, una de las empresas del grupo, “no es una empresa regulada por este organismo y tampoco se encuentra en trámite de registro para operar” como agente registrado.
